Potrerillo, mi lugar primero, ese que me hizo de campo para siempre. Lugar y gente que me enseñaron que ni en la pobreza ni en la riqueza se trata de dinero, que la familia importa, que los momentos se escapan, que el futuro es hoy. Lugar y gente que me enseñaron que Dios es lo importante, (aun más que la religión), y que la Fe es suficiente cuando sabes que la tienes. 

Potrerillo de mi infancia, desconocido para el mundo pero profundamente importante para mí. Al desvanecerse mi inocencia, fui descubriendo las necesidades, la miseria, y el dolor de no existir. Entonces que decidí salir a buscar aquello, aquello que no entendía exactamente qué era pero que sí necesitaba. Y comencé a transplantarme, de Potrerillo a Santiago de Cuba, Camagüey, La Habana, luego Argentina y Norteamérica. 

Lo mas importante de mi vida no consiste en el destino geográfico al que llegué, sino lo que aprendí y aun aprendo en mi proceso de búsqueda. El viaje me ha moldeado, creo que en su mayoría para bien, pero en algún momento quisiera volver a ser el chico que corría descalzo en Potrerillo.

 
En el viaje conocí a las personas más importantes de mi vida (...) pero quizás, para conocerlos a ellos tuve que dejar en el camino a las personas más importantes de mi vida... vivo en el país más importante de mi vida, que para conocerlo debí dejar el país más importante de mi vida...

Si, ya se que suena contradictorio...pero he aprendido a vivir con ello. Es el reflejo de lo que soy, de lo que somos nosotros los inmigrantes...

Cubano desde siempre, con Argentina en el corazón y viviendo en Estados Unidos de América...

#YoTambienSoyInmigrante

#Dreamer